Los tomates secos son un alimento amado y difundido en toda la región mediterránea, obtenido mediante la deshidratación de los tomates en horno o al sol. Esta técnica garantiza una duradera conservación del producto y resalta sus propiedades nutritivas, conferiendo además una atractiva intensidad de sabor.
Tomates, aceite de oliva virgen extra, vinagre de vino, sal, ajo, perejil, orégano, albahaca, trazas de guindilla.
¿Sabías que... En el pasado, los campesinos de las regiones costeras del sur, antes de la deshidratación, sumergían los tomates cortados a la mitad longitudinalmente, en las maravillosas aguas de nuestro mar?
Un sugestivo y colorido rito que tenía el doble propósito de facilitar su conservación y conferirles sabor y salinidad.
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Los tomates secos en aceite representan una verdadera tradición culinaria italiana, conocida en todo el mundo. La preparación de este producto es muy antigua y se remonta incluso a la época del Imperio Romano, cuando los tomates se secaban al sol para conservarlos durante el invierno. Posteriormente, la técnica de conservación se perfeccionó con la adición de aceite de oliva, que junto con especias como el orégano, el pimiento y el ajo, confiere al producto un sabor intenso y aromatizado. Gracias a su versatilidad, los tomates secos en aceite pueden ser utilizados de mil maneras diferentes, para enriquecer tus platos favoritos con sabor y salud.
Los tomates secos en aceite son un ingrediente muy versátil en la cocina. Gracias a su sabor intenso y concentrado, pueden ser utilizados para dar un toque extra de sabor a muchos platos. Por ejemplo, pueden añadirse a las ensaladas para conferir un sabor más pronunciado, o usarse como condimento para la pasta o la pizza. Además, los tomates secos en aceite son una excelente alternativa a los tomates frescos fuera de temporada, ya que pueden conservarse durante varios meses sin perder sus propiedades nutricionales. Finalmente, es interesante notar que la tradición de los tomates secos en aceite se remonta a la cocina mediterránea, donde se utilizaban como conserva para los meses de invierno. Una tradición que hoy podemos apreciar también nosotros, gracias a su versatilidad en la cocina.
Los tomates secos son un alimento amado y difundido en toda la región mediterránea, obtenido mediante la deshidratación de los tomates en horno o al sol. Esta técnica garantiza una duradera conservación del producto y resalta sus propiedades nutritivas, conferiendo además una atractiva intensidad de sabor.
